Dark Funeral en la noche de siluetas
El 11 de marzo el clima se percibió oscuro, nublado y fresco, incluso llovía de a momentos. El estado del cielo nos anticipaba de una presencia lóbrega en la ciudad de Buenos Aires. Ya que esa noche, en el Teatrito, se presentó Dark Funeral bajo la gira “Let the devil in”. Además, tocaron como bandas teloneras Exterminio, Dislepsia y Nuclear Sathan.
La velada inició con Exterminio (algo curioso, ya que es una banda experimentada en el ambiente del Death y del death grind nacional). Su música transportó al público tempranero al apocalipsis en “100 Años de Horror”. Este viaje apocalíptico se llevó a cabo con los riffs potentes al ritmo machacador de la batería de Javier Cuello y la voz del “Tano” Grippo que transformaba los guturales casi en pig squeals. Cerraron con “Bloody Death” y “The Line Of Fire” dejando las expectativas por las nubes. La tendencia por bandas de renombre del death metal argentino siguió siendo el plato inicial del show. Dislepsia fue la encargada de llamar la atención de la audiencia que se encontraba dispersada. Como de costumbre, el set fue marcado por el sonido avasallante y brutal, mientras que el showman y cantante, Leandro Cabrera, brindó la teatralidad en sus poses que le daban vida al relato de cada canción.
Y si de dramatismo y de puesta en escena se habla, la última banda telonera se llevó el premio Nuclear. Sathan fue la agrupación de la noche que más se acercó al subgénero pretendido. Maquillaje, espiritismo, calaveras de animales alzadas a los gritos desgarradores y perturbantes de una técnica única como la de Maximiliano Zelaya, mejor conocido como Ayalez, fueron los grandes protagonistas de la presentación. Pareciese que las bandas de black metal y la luz frontal no se llevan bien. Tanto la telonera como la principal abrazaron la oscuridad y nos llevaron a una verdadera noche de siluetas. En la cual, si no estabas cerca del escenario, tendrías que adivinar quién es quién o luchar por acercarte y visualizar mejor.
Llegado el momento, el humo y el frio colmaron el recinto y los bombos sonaron marcando el suspenso. La presencia de Dark Funeral, mejor conocidos como “Los Inefables Reyes del Black metal”, estaba de pie en la penumbra para brindar “Nosferatu” y “Atrum Regina” a sus fieles seguidores y determinar cómo iba a variar el set entre lo clásico y lo moderno. Las primeras impresiones eran tan espeluznantes y disfrutables como si se
tratase de la primera vez que se ve “El Exorcista”. La calidad del sonidoabrazó a todos y los poseyó en un trance que es difícil de olvidar. El encargado de llevarlos a navegar por los infiernos de Suecia era Heljarmadr. El cantante saludó a la audiencia y, más tarde, criticó los celulares y los flashes de las cámaras fotográficas por perturbar la puesta en escena oscura (suceso que molestó al sueco en más de una oportunidad, al punto de acercarse a un fan y bajarle el teléfono).
Los clásicos llegaron “The Arrival of Satan’s Empire”, “Open the Gates” daban el ímpetu a moverse a un ritmo constante de la batería que fue imposible de seguir con la cabeza, pero las melodías, letras y coros eran entonados con el alma: “Open the gates, Satan”, aclamaba el público una y otra vez.
La velada se tornaba más oscura en el final del abismo. La llegada de las últimas canciones cargadas de historia elevó la adrenalina en la gente: “My Dark Desires” e “In the Sign of the Horns” hicieron que la maloik se alce constantemente. Incluso cuando en “Let the Devil In” Heljarmadr recitó una prosa y durante “Where Shadows Forever Reign” dando la última señal a la ondeada de la bandera negra. La bandera de victoria de Dark Funeral.
Setlist: Dark Funeral:
1- Intro
2- Nosferatu
3- Atrum Regina
4- To Carve Another Wound
5- The Arrival of Satan’s Empire
6- When I’m Gone
7- As One We Shall Conquer
8- Unchain My Soul
9- Open the Gates
10-Shadows Over Transylvania
11-My Dark Desires
12-In the Sign of the Horns
13-Let the Devil In
14-Where Shadows Forever Reign
15-Outro
Cronista: Candela Álvarez – Fotografía: Maru Debiassi
Galeria: